La Libertad de expresión en democracia y el desafío del periodismo independiente. - El Mensajero

.

Recientes

Ads

jueves, 20 de enero de 2022

La Libertad de expresión en democracia y el desafío del periodismo independiente.

 


Fuente: elnacional.pe


El Mensajero Hn comparte nuestra convicción universal en cuanto a que la Libertad de Expresión es un derecho elemental de todos los ciudadanos del mundo. Estaremos de acuerdo en que el rol de los medios de comunicación en las sociedades está ligado al ejercicio y goce de la libertad. Así los avances y logros de la ciencia, la técnica y la tecnología en la comunicación y difusión de las ideas, deben estar al servicio de todos los seres humanos.


Especialmente si lo que pretenden es alcanzar mejores niveles de vida, la equidad y la justicia. Sin embargo, no obviamos las amenazas que se ciernen sobre la vida de quienes activan permanentemente por lograr el respeto a la dignidad humana.



Contexto indeseable. 

Desde 1948 en asamblea general la Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoció lo inalienable que es el derecho a la libertad de expresión. Igualmente, fue ratificado como tal por el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Ambos instrumentos han sido burlados en casi todos los Estados Partes. De acuerdo con el Comité para la Protección de Periodistas, existen regiones en el mundo extremadamente peligrosas para el ejercicio de esta profesión. 

                                      

Para fines del 2021, ya se han registrado 274 periodistas presos en diversos países sin contar los que fueron detenidos y liberados sin juicio legal. Solo en la región Asia, África y Oriente Medio se reportan 135 encarcelamientos. China con 47 periodistas presos encabeza la lista, en Turquía 37, en Egipto 27 y en Arabia Saudita 24.


 La última oleada de represión o censura ejercida contra los profesionales de la información se da en países donde hay tensiones políticas y guerras. Países como Rusia, Etiopia y Bielorrusia constantemente son señaladas por interrumpir la libre de circulación de la información.


Sin importar nacionalidades, regímenes políticos e ideológicos atropellan la libertad de expresión los mismos poderes facticos que subyugan a su voluntad a los pueblos.


Sitial Americano

En América hubo 3,350 agresiones contra periodistas y medios de comunicación según el informe SOMBRA 2020. El 59% de estas agresiones tuvieron al Estado como autor principal de las violaciones.


Según Reporteros Sin Fronteras (RSF), tres países de América Latina: México, Brasil y Honduras son los más violentos contra la prensa. México se lleva el galardón de "país más peligroso" solo comparado con Siria en Oriente Medio. 



Mohamed Mourin. Falleció prisionero. (Vicenzo Imparato. 16-o6-20).

(Tomado de PRESSENZA. International Press Agency).


También se señalan como hostiles para la libertad de prensa e información a Cuba, Venezuela y Nicaragua. Coincidentemente los tres países sufren desde hace décadas un férreo bloqueo económico, financiero y comercial, por parte de Estados Unidos. Ese acoso y amenazas les sirve a sus gobiernos como justificación para ejercer violencia estatal contra quienes se dedican a informar. Especialmente a quienes ejercen el oficio desde enfoques no gubernamentales. Informes independientes señalan que países auto titulados como “paladines de la democracia” los Estados violan sus propias Constituciones Políticas.


Para la Democracia resulta contraproducente e ineficaz censurar ideas, pero los gobernantes autoritarios aplican el principio empírico de que "Calladitos se ven más bonitos".


Cuando censuran a los ciudadanos por expresar sus opiniones “demuestran una falta de respeto absoluto a las personas”, Según opina Simón Itumberri en su blog Libertad de Conciencia. El año 2020 murieron en prisión dos periodistas reconocidos internacionalmente. Los pueblos de Egipto y Honduras ambos con gobiernos “democráticos” vieron impotentes la muerte de sus "hombres de prensa".           

                     

El egipcio Mohamed Monir, de 65 años y el hondureño David Romero Ellner de 67 años, fallecieron cuando cumplían condenas impuestas por el gobierno. Ambos contrajeron enfermedad del Covid-19 en prisión. Estos hechos constituyen un poderoso mensaje para infundir terror a los periodistas cuestionadores del “estado de cosas" en los países. Así países que presumen la Democracia y el Estado de Derecho; ejecutan mayor cantidad de atropellos, incluso asesinatos contra los trabajadores de la información.


 “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.” Articulo 19 Declaración universal de los Derechos Humanos (ONU 1948).



David Romero Ellner. Falleció prisionero el 18 de Julio 2020. 

Fuente: ELPAIS.HN.


Autoritarismo democrático a la carta.

En países donde Estados Unidos ejerce poderosa influencia, los gobiernos violan consuetudinariamente la libertad de expresión. Tal es el caso de sus aliados India, Pakistán, Afganistán y otros en Asia. En América destacan por su perfil violento y agresivo contra los periodistas: México, Colombia y Honduras. Ahí mismo en los Estados Unidos, país abanderado y auto consagrado como modelo para la democracia mundial, la policía arrestó a ciento diez periodistas. También agredieron a trescientos cuando cubrían protestas sociales.


Cuando gobernó Donald Trump, (2016-2020), policías azuzados por la agresiva retórica del presidente contra los medios de comunicación; arrestaron a treinta y cuatro reporteros. Esa tendencia alentó la arbitrariedad oficial en países donde el autoritarismo y la antidemocracia tienen carta de ciudadanía.


"Calladitos se ven más bonitos”.

Las evidencias de atropellos a los periodistas dejan entrever la intencionalidad de silenciar a la prensa. Así se viola en su grado máximo el respeto a la vida, a la libertad de expresión y el derecho a la información. Los hechos, demuestran que los abusos de poder no son monopolio exclusivo de los regímenes dictatoriales y autoritarios. Igualmente se dan también en las democracias.


Aunque el periodismo independiente no los puede evitar, la denuncia de esos abusos cumple en sí misma una función extraordinariamente valiosa. Asimismo, los asesinatos, las palizas, los secuestros, encarcelamientos y las amenazas contra periodistas son mucho más de lo que se reportan. Se sospecha que la tendencia en los últimos tiempos es impedir que los ciudadanos estén bien informados.


El silencio impuesto desde las súper estructuras persigue que los ciudadanos no conozcan la verdad; que no sean auténticamente libres. Estamos, probablemente, ante la mayor amenaza que existe contra la democracia en este tiempo. La negación de los hechos, la manipulación o la creación de relatos que satisfacen los prejuicios y el sectarismo no es una actividad inocente. Tiene como propósito el control del poder absoluto. Lo que equivale a negar y anular la esencia del Estado de Derecho por los regímenes democráticos, autoritarios y dictatoriales del mundo.


Fuente: El País.


 Julián Assange queda en manos de Joe Bide.

MARTA PEIRANO|17 ENE 2021 - 17:30 CST


“Si el fundador de Wikileaks muere a la espera de la decisión del Gobierno de EE UU, el presidente habrá perdido la oportunidad de liberar a la prensa de la trampa que diseñó su Administración…”                                          
                          

Un exilio que no siempre es dorado 

Cincuenta periodistas en todo el mundo optaron por la ruta del exilio para poder salvar sus vidas. No siempre resulta la mejor alternativa pero los estados y sus gobiernos autoritarios violentan convenios internacionales al no proporcionar la debida protección a quienes huyen de la barbarie.


Como muestra citamos el caso del comunicador social hondureño Edwin Rivera Paz asesinado en la ciudad mexicana de Tapachula, el 9 de Julio del 2020. Rivera Paz huyo de Honduras tras ser amenazado a muerte por haber presenciado el asesinato de su compañero periodista Igor Padilla.


Este fue ejecutado en plena calle en San Pedro Sula, fenómenos sociales como la violencia, el narcotráfico, la diversificación de la censura y el desempleo obligan a decenas de periodistas a emigrar pero según opina el periodista salvadoreño Oscar Martínez, "los centroamericanos no emigran, huyen"


Esa suerte alcanza a los periodistas que se van porque si se quedan, alguien con poder ordenar su asesinato. Para todos ellos, las políticas y los mecanismos de control social ejercida desde los Estados, convierten sus sueños y expectativas de vida en auténticas pesadillas. Condiciones de vulnerabilidad familiar acompañan a los trabajadores de la información en los países que les brindan asilo o refugio.


Honduras: Intimidaciones y amenazas a la orden.

En Honduras "prevalecen la intimidación, amenazas a muerte, desprestigio, y acoso directo contra los periodistas" así lo afirma Dina Meza, coordinadora de la Asociación Por la Democracia y los Derechos Humanos (ASOPODEHU) en reciente entrevista concedida a medios de comunicación hondureños.


Lo anterior “golpea directamente a quienes no se guían por la agenda informativa oficial del gobierno de turno”, aseveró Meza. A octubre del 2020 se han registrado treinta y nueve ataques contra periodistas y comunicadores sociales. La policía, las Fuerzas Armadas y las mafias del crimen organizado son identificados como los principales autores materiales e intelectuales de tales atropellos.

      

Después del golpe de Estado perpetrado el 29 de junio del 2009, se tornó muy peligrosa la labor informativa en el país. Mayores riesgos han corrido desde esa fecha quienes cubren las manifestaciones antigubernamentales.


Un caso concreto es el del periodista Jairo López, de la ciudad de Choluteca, Honduras. López sufre persecución judicial por causa de su cobertura de las protestas sociales en la región sureña. No tuvieron igual “suerte” otros periodistas y comunicadores sociales que además de ser perseguidos, fueron asesinados mediante ejecuciones extrajudiciales en distintas ciudades del país.


Al respecto, la Revista de Ciencias Sociales de la Universidad de Costa Rica; recientemente publicó que: “Los casos de asesinatos de periodistas en Honduras se vinculan con el despliegue grupos empresariales, militares, burocráticos y clericales, las cuales van más allá de golpear a la profesión periodística, ya que, dichas acciones alcanzan a todos los movimientos y es sistemático de acciones represivas llevadas a cabo por los sectores dominantes que articulan contra organizaciones populares”.


En Honduras el ultimo comunicador social asesinado, Pablo Isabel Hernández; es una muestra de que la escalada fatal contra los hombres y mujeres de prensa comprometidos con la democracia está vigente. Ni el Estado ni la sociedad en general muestran algún interés por detener la represión contra los actores de la libertad de expresión.


El Estado de Honduras viola convenios y tratados internacionales, "al no tomar acciones contundentes para frenar los actos de violencia contra los periodistas". Así mismo "incumple las recomendaciones del Examen Publico Internacional (EPU) de proporcionar protección a los comunicadores", afirmo Dina Meza.


Pablo Isabel Hernandez Rivera (asesinado el 9 de enero 2022)


Director de Radio Comunitaria Tenan. Tierra Colorada. San Marcos de Caiquin. Lempira Honduras C.A.  Facebook @HNAMCH

                                                                          

La SIP también denuncia.

En su 77 Asamblea, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), conjuntamente con el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH), denunciaron que desde el año 2011 a octubre del 2021, hubo un total de veinte asesinatos de periodistas en Honduras. Ambos organismos señalaron al crimen organizado como "el mayor asesino de periodistas en la región". La oficina del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras (CONADEH) informó que “noventa por ciento de los asesinatos se encuentran en total impunidad”.


Según la SIP, -organización empresarial que aglutina a los propietarios de los grandes medios de comunicación en América-, la libertad de prensa sufrió "un claro retroceso". A noviembre del 2021 la SIP no se ha pronunciado acerca de la serie de “reformas” al Código Penal hondureño, (en vigencia desde junio de 2020). 


Entre las organizaciones gremiales, se destaca el papel de denuncia nacional e internacionalmente hecho por la Asociación de Prensa Hondureña (APH). Tales reformas según la opinión del Comité de Libre Expresión (C-LIBRE) “violentan libertades fundamentales y criminalizan la labor periodística”. Para diversos juristas hondureños que influyen en la opinión pública, el Estado hondureño impuso reformas “inconsultas y arbitrarias".


El Congreso Nacional modificó sin consensuar, una ley secundaria, para conculcar el derecho a la libertad de expresión, una garantía constitucional fundamental para la libertad y la democracia.


Redacción: Guillermo Meza.
 



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ads

type='text/javascript'/>